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LA INVENCIÓN DE LA IV GAMA: LA EPIDEMIA SILENCIOSA

No es una tarea compleja concretar los motivos del boom de ventas de las ensaladas en bolsa: la obsesión por la practicidad, la modificación en los hábitos de consumo y la búsqueda incesante de ahorrar tiempo en la cocina facilitó el interés por la compra de productos frescos troceados, lavados, embolsados y, se supone, listos para comer. Esto es, un nicho de mercado que el capital alimentario materializó con la invención de la IV Gama. 

El interés creciente por la compra de productos de IV gama en Europa también es perceptible en España, donde más de la mitad de los españoles incluyen estos envases de plástico en la cesta de la compra de manera habitual. Según el informe de consumo alimentario 2023, publicado este año por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno de España, “aumenta la compra de verduras y hortalizas de IV gama a cierre de año 2023 en una proporción del 4,9 % de los kilos con respecto al año anterior. El valor del mercado ha tenido un incremento del 6,9 % en la facturación y el precio medio para estos productos cierra en 3,90 €/kilo una cantidad superior en un 1,9 % con respecto al año 2022”.

LA DENUNCIA FRANCESA

Según el estudio de la revista francesa 60 Millions de Consommateurs publicado en marzo de 2024, la mayoría de ensaladas en bolsa contiene residuos de pesticidas. Tras analizar 26 marcas de ensaladas en bolsa, tan solo 5 referencias estaban libres de contaminación. 

La investigación examinó ensaladas tanto de marcas nacionales (Bonduelle, Florette, Les Crudettes) como marcas de distribuidor de grandes cadenas de supermercados (Aldi, Lidl, Carrefour, Monoprix, Intermarché, E. Leclerc, etc.). Fuesen o no vegetales procedentes de agricultura intensiva u ecológica, la cuestión era saber si contenían residuos de pesticidas y en qué cantidad. Un vistazo rápido al gráfico no deja lugar a la duda: casi todas las ensaladas en bolsa contienen pesticidas sin especificarlo en la etiqueta, y la mayoría de marcas no precisan el origen del producto. Peor aún, algunos pesticidas están clasificados como “cancerígenos, mutagénicos o tóxicos para la reproducción (CMR)”, afirma la investigación. De promedio, se observó una media de 3,8 residuos de pesticidas por ensalada en bolsa contaminada. En total, 11 lechugas en bolsa contenían uno o más residuos de plaguicidas potencialmente CMR, según la clasificación de la Agencia Europea de Sustancias Químicas (ECHA).  

“Teóricamente no existe ningún riesgo para la salud. Pero hasta la fecha los científicos no saben casi nada sobre los efectos del cóctel entre todas estas moléculas”. Es decir, el “cóctel” de moléculas que se encuentra en las ensaladas en bolsa no se ha estudiado, ya que la ley sólo incide en unos límites legales de residuos de cada pesticida analizado individualmente. “Nuestros análisis identificaron 28 moléculas diferentes, un auténtico cóctel con ocho moléculas sospechosas de tener al menos una acción cancerígena, mutagénica o tóxica para la reproducción”, subraya la investigación. 

LA PREGUNTA INCÓMODA

Con los datos aquí expuestos se generan varios interrogantes: ¿Realmente están limpias estas ensaladas envasadas que llenan el lineal de los supermercados? ¿Por qué no se sabe con precisión los pesticidas que contienen cada bolsa de ensalada? Y lo más importante: en vista de la alarma desatada en Francia, y teniendo en cuenta que España lidera el uso de pesticidas en Europa, (76 mil toneladas de pesticidas en 2020 según PAN Europe) ¿por qué no se ha realizado un análisis oficial sobre los residuos de pesticidas que contienen las ensaladas en bolsa en España?

Como no hemos encontrado ninguno, Justicia Alimentaria hemos analizado dos ensaladas en bolsa muy populares que se comercializan en el Estado español. 

EL ANÁLISIS

Una vez destapada la problemática con los pesticidas en la mayoría de ensaladas en bolsa de Francia, y como el Observatorio de Corporaciones Alimentaria se fija en las grandes empresas del capital alimentario, es imposible no fijar la atención en la empresa que más ensaladas envasadas vende y en el supermercado que más factura: Florette y Mercadona respectivamente. Además, son dos de las corporaciones alimentarias que más ayudas millonarias reciben de la Política Agraria Común (PAC).  .

  • Florette. el gigante verde.

Factura más de 225 millones de euros anuales y envasa más de 750.000 ensaladas al día. Con una simple regla de tres, a cada ciudadano español de promedio le tocan 6 bolsas de ensaladas Florette anualmente. Y es que Florette ya elabora más del 40% de las ensaladas envasadas que se consumen en España. La empresa con sede en Milagros (Navarra) fue absorbida en 2001 por la cooperativa y procesadora agroalimentaria francesa Agrial, presente tanto en Europa como África y Estados Unidos, para convertirse en la empresa líder del sector de la IV gama con mucha diferencia respecto a la competencia. Además, desde que iniciara su actividad en 1988, Florette es el proveedor exclusivo de la lechuga de McDonald´s.

  • Mercadona, el 2,1% del PIB español. 

Cerró el año 2023 con un balance récord en sus cuentas tras ganar un 40% más que el año anterior, cuando alcanzó un beneficio de 718 millones. Con unas ganancias de 35.527 millones de euros, la empresa de Juan Roig con sede en Paterna (Valencia), ha alcanzado una cuota de mercado en España del 27,6% y ya equivale al 2,1% del conjunto del PIB español. 

Para el análisis de producto, desde Justicia Alimentaria nos decantamos por la ensalada en bolsa de la marca Florette denominada “Mezclum” de 150 gramos, y la ensalada en bolsa de Hacendado (marca blanca de Mercadona) denominada “Primavera” de 200 gramos. Ambos productos envasados y precintados se enviaron el mismo día de su compra en fresco a un laboratorio para efectuar el análisis correspondiente. 

IMPORTANTE: Justicia Alimentaria somos conscientes que la muestra no es en absoluto representativa para sacar ninguna conclusión precipitada de las marcas en cuestión ni del sector de hortalizas de IV gama en general, pero reclama un estudio exhaustivo y generalizado del sector y la publicación de los resultados. 

Y es que desde Justicia Alimentaria podemos avanzar que se detectaron 6 pesticidas: 5 fungicidas y 1 insecticida. Por cierto, dos de ellos están en la lista de pesticidas candidatos a la sustitución: Metalaxilo y metalaxilio-M y Fludioxonilo. Los pesticidas candidatos a la sustitución son substancias que, debido a su toxicidad, deberían ser retiradas del mercado en cuanto se disponga de alternativas de menor riesgo.

Pesticidas detectados en el análisis de la ensalada Mercadona:

  1. Metalaxilo y metalaxilio-M
  2. Azoxistrobina
  3. Boscalid
  4. Clorantraniliprole

Pesticidas detectados en el análisis de la ensalada Florette:

  1. Mandipropamid
  2. Fludioxonilo 

NOTA DESTACADA: todos los pesticidas encontrados están por debajo del límite máximo permitido y, por lo tanto, cumplen con la ley vigente pese a que no se mencionan en el etiquetado. Con los resultados obtenidos, desde Justicia Alimentaria queremos poner el acento en la problemática del efecto cóctel y el efecto acumulativo de los pesticidas que pasa por alto en estos productos envasados supuestamente listos para comer. 

EL EFECTO CÓCTEL: ¿Qué es?

  • El efecto que se genera cuando diferentes sustancias activas tóxicas actúan al mismo tiempo en el organismo.
  • Una cosa es cuando una sustancia tóxica entra en nuestro organismo y otra es cuando lo hacen 4 o 2 al mismo tiempo 

EL EFECTO ACUMULATIVO: ¿Qué es? 

  • Cuando la exposición a bajas dosis legales de pesticidas se mantiene durante años. Es aquí cuando los límites legales requieren ajustes de cada pesticida aislado o, directamente, se prohíbe el pesticida o pasa ser clasificado como de alto riesgo.

A fecha de hoy, la evidencia científica en el efecto cóctel y en el efecto acumulativo no ha conducido a ninguna restricción o prohibición de pesticidas en la UE.

PLÁSTICOS: lo que el ojo no ve dentro de la bolsa 

El mayor desafío de la IV Gama sigue siendo el envasado de plástico. Actualmente, no existe todavía un sustituto directo del plástico que asegure las mismas condiciones de transporte y durabilidad para el sector de la IV Gama. Es más, 1 de cada 4 envases de plástico son de uso alimentario.

Las ensaladas en bolsa llevan asociado un sobreconsumo de plástico inaceptable. Cada año se vierten al medio ambiente 2.500 toneladas de plástico derivadas de estos envases de usar y tirar, ello equivale a cubrir 100 veces el parque del Retiro madrileño con plásticos, cada año.

Las empresas productoras de ensaladas de plástico son muy conscientes de la mala imagen que da, en los tiempos actuales de emergencia ambiental y climática, verter toda esa cantidad ingente de plásticos al medio. Por ello, caen en cierto ecopostureo afirmando, por ejemplo, que la energía que usa para fabricarlos es neutra en carbono o que sus envases de plástico duro (PET) para platos preparados son de origen reciclado y reciclables. Que sean reciclables no significa que se reciclen.

En el Estado español, el 80 % de los envases terminan en vertederos, incinerados o lanzados al medio ambiente, y el nivel de recuperación/reciclaje de envases de plásticos en el Estado español es del 25,4 %. Dicho de otra manera, el principal uso del plástico es contaminar el planeta, y el principal receptáculo no es otro que los suelos y los ecosistemas acuáticos terrestres.

HACIA EL FIN DEL PLÁSTICO DE USAR Y TIRAR

Tal y como avanzó la campaña Plastívoros de Justicia Alimentaria, la directiva sobre plásticos de un solo uso de la UE ha dado algún paso hacia adelante al establecer medidas de prohibición, restricción de acceso al mercado, ecodiseño, responsabilidad ampliada del productor (RAP) y medidas de concienciación para los 10 tipos de plásticos de un solo uso más presentes en el medio marino. El problema es que estos preceptos solo cubren el 5 % del plástico de un solo uso.

Teniendo en cuenta los costes ambientales y sociales de la producción de plástico, la durabilidad de este material y los problemas que acarrea cuando se desecha al medio ambiente, las respuestas deben ir encaminadas a terminar con los productos de plástico desechables (a excepción de usos imprescindibles como el caso médico o sanitario).

Reciclar no es la solución, la solución es reducir el uso de plásticos. Apostar por cadenas de suministro más cortas, con alimentos de proximidad, ecológicos y sin envases o, cuando sean necesarios, reutilizables. El Parlamento Europeo aprobó en abril de 2024 las nuevas normas de la Unión Europea para reducir por primera vez los embalajes de los alimentos. Se trata de reducir el impacto de los embalajes en términos medioambientales y de salud, partiendo de que cada europeo genera casi 190 kilos de residuos de envases cada año y se espera que esta cifra aumente a 209 kilos en 2030 sin medidas adicionales, según los datos que maneja la Comisión Europea.

El reglamento establece objetivos de reducción de envases (5 % para 2030, 10 % para 2035 y 15 % para 2040) y exige a los países de la Unión Europea que reduzcan, en particular, la cantidad de residuos de envases de plástico. A partir del 1 de enero de 2030 se prohibirán ciertos formatos, como los envases destinados a frutas y verduras frescas sin procesar.

Son precisamente toda esta serie de incertidumbres en la estimación de la exposición a pesticidas y microplásticos, junto a los residuos generados, o la falta de estudios científicos concluyentes, que nos hace aconsejar a la persona consumidora que descarte la compra de cualquier ensalada en bolsa y se decante por la lechuga fresca entera para ser consumida después de un intenso lavado. 

Peticiones

Al Gobierno del Estado español…

  • La Agencia Española Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) deber hacer un análisis exhaustivo de todas las ensaladas en bolsa comercializadas en España y hacer públicos los resultados. 
  • El Ministerio de Sanidad debe implementar nuevas políticas restrictivas a los biocidas teniendo en cuenta que España es el país que más pesticidas produce en Europa. 
  • El Gobierno debe prohibir la utilización de envases de plástico de un solo uso en alimentos en coherencia con las nuevas normas europeas para reducir, reutilizar y reciclar los envases

A la persona consumidora…

  • Justicia Alimentaria recomienda el consumo de lechuga fresca: por tu salud y la del planeta, hazte tu ensalada que no cuesta nada. 
  • Descarta las ensaladas en bolsa y las ensaladas preparadas de IV Gama de grandes marcas porque pueden estar contaminadas con pesticidas, generan un problema medioambiental con toneladas de plásticos de un solo uso y son productos envasados más caros y menos sanos que las hortalizas frescas.

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