‘Entreiguales’: La alimentación saludable empieza en el barrio

En marcha “Entreiguales”, la iniciativa que ha conseguido disminuir el consumo de bebidas azucaradas y alimentos procesados entre los colectivos más vulnerables

 La ciudad de València acogerá una nueva edición del programa de formación en derecho a la alimentación Entreiguales. El proyecto, promovido por las asociaciones ACOEC y Justicia Alimentaria, impulsa el derecho a una alimentación saludable sostenible y solidaria entre los colectivos más vulnerables de València.

El próximo domingo, 16 de octubre, se celebra el Día Mundial de la Alimentación, que este año se desarrolla bajo el lema “No dejar a nadie atrás”. El 2022 nos encuentra con una pandemia en curso, conflictos, cambio climático, subida de precios, desigualdades y tensiones internacionales, lo que está afectando la seguridad alimentaria mundial. Con este lema, el Día Mundial de la Alimentación se convierte en un llamamiento para construir un mundo sostenible donde todas las personas tengan acceso regular a suficientes alimentos nutritivos.

En este marco, Entreiguales, un proyecto financiado por la Consellería de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática, incluye talleres que enseñan a descifrar el etiquetado de los productos al mismo tiempo que se muestra la preocupante cantidad de azúcar, sal y grasas saturadas que pueden contener algunos de los productos procesados.

El programa fomenta la adopción de hábitos saludables y sostenibles, a través del incremento del consumo de verduras y legumbres locales de temporada, y disminuyendo el consumo de carne roja y derivados cárnicos entre las personas en situación de vulnerabilidad, un colectivo especialmente afectado por la inseguridad alimentaria.

Las actividades de dinamización también incluyen excursiones al entorno rural, que darán a conocer pequeños proyectos agroalimentarios sostenibles, así como encuentros comunitarios, que mostrarán experiencias colectivas ya existentes que mejoran el acceso a una alimentación saludable y sostenible.

“Cambiar algunos hábitos de consumo, tomar elecciones informadas, organizarnos colectivamente para acceder a alimentos de mejor calidad, son medidas que podemos poner en marcha casi todas las personas, con más o menos dificultad. Son cosas que podemos hacer por nosotras mismas”,afirman desde las entidades organizadoras.

Un proyecto para los colectivos más vulnerables

El alarmante incremento de las personas en situación de inseguridad alimentaria, provocado por los meses más duros de la pandemia del Covid-19, motivó a las organizaciones ACOEC y Justicia Alimentaria a crear un programa para trabajar conjuntamente por la defensa de la soberanía alimentaria entre este grupo de población.

Entreiguales formará a personas vulnerabilizadas pertenecientes al ámbito asociativo de València para capacitarlas como agentes de cambio de su entorno mediante la acción comunitaria, el intercambio de experiencias y el fortalecimiento del tejido social. Está previsto que esta segunda edición, para la que aun existen plazas disponibles, comience el próximo 20 de octubre en las instalaciones del Centro Municipal de Juventud de Benimaclet.

En la primera edición de Entreiguales se formaron 10 dinamizadoras comunitarias, que trabajaron con aproximadamente 350 personas de distintos colectivos y barrios de la ciudad.

Los resultados más destacables del proyecto son la disminución del consumo de bebidas azucaradas y de fiambres y embutidos y el aumento del consumo de verduras, frutas y pescado en el entorno social de las dinamizadoras. Uno de los impactos más fuertes del proyecto es haber generado interés por el etiquetado. “La mayor parte de las participantes dice que antes nunca se fijaba en las etiquetas y que ahora no pueden comprar sin mirarlas” dicen desde las organizaciones.

 

Más de dos millones de hogares españoles sufren inseguridad alimentaria

La alimentación adecuada es un derecho reconocido en la Carta Internacional de Derechos Humanos, en distintos Pactos Internacionales y en numerosas Constituciones y, por tanto, los Estados tienen la obligación de garantizar la alimentación saludable y sostenible de la población, con especial hincapié en los colectivos más vulnerables.

Sin embargo, prácticamente 90.000 personas mueren al año y su principal factor de riesgo ha sido la alimentación insana. Según un estudio de Justicia Alimentaria, estas enfermedades se ceban con las clases populares. Además, en España, un 13,3% de los hogares españoles experimentan inseguridad alimentaria, afectando a casi 2,5 millones de hogares y, por tanto, a alrededor de 6.235.900 personas, tal como afirma un reciente estudio de la Universidad de Barcelona. Es decir, que no come bien quien quiere, sino quien puede permitírselo.

Por otro lado, la alimentación supone algo más de la mitad de la Huella de Consumo en España, debido al carácter altamente intensivo e industrial que presenta nuestro sistema agroganadero y su dependencia de recursos fósiles, fertilizantes químicos y grandes cantidades de agua. En definitiva, la transición a un sistema alimentario sostenible es necesaria para preservar las condiciones de habitabilidad del planeta Tierra.

Por todo esto, desde las organizaciones se afirma que el sistema alimentario industrial globalizado está fallando en su cometido de proporcionar una alimentación sana y sostenible, además de que los Estados no están cumpliendo su compromiso de garantizar el Derecho a la Alimentación adecuada.

Para garantizar este derecho, Justicia Alimentaria lleva años reclamando políticas públicas que hagan frente a las desigualdades alimentarias: un etiquetado claro que alerte de la presencia de ingredientes nocivos, tipos impositivos que fomenten el consumo de alimentos sanos (por ejemplo, IVA cero para las verduras y frutas) y una compra pública saludable y sostenible desde comedores escolares y otros espacios dependientes de la Administración, son ejemplos de políticas públicas que democratizan el acceso a una alimentación adecuada.

 

Sobre ACOEC y Justicia Alimentaria

ACOEC es una entidad ubicada en el barrio de Benimaclet que promueve la salud y la inclusión social de colectivos en riesgo de exclusión social.

Justicia Alimentaria es una asociación que promueve un modelo alimentario saludable, sostenible y justo, desde la cooperación, la educación y la movilización.

El trabajo conjunto de ambas entidades ha permitido poner en marcha Entreiguales, un proyecto que mejorara la salud alimentaria de las personas más vulnerables de València ciudad.

 

 

 

 

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Daniel García

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